El conocimiento de la Nueva Creación

Con sus conocimientos químicos, los científicos experimentan con el propósito de imitar el milagro de la vida, la longevidad, y la salud total, y no pueden llegar al éxito. En cambio, han surgido virus que matan a los hombres, y armas químicas con mayor capacidad para la destrucción de la Humanidad. Los astrofísicos intentan, desde sus macros y micros cálculos matemáticos y astronómicos, explicar la vida y su origen, sin lograrlo.  En cambio, muchos de ellos han enloquecido intentando explicar lo inexplicable - aunque muy cerca está: en la boca y el corazón - mas, no lo entienden. Los filósofos buscan la verdad, sin encontrarla. Y continúan buscando en todas partes, menos donde deben, y así, muchos se han desviado en vez de llegar a la meta deseada: la libertad suprema del poder ilimitado que maneja el hombre que conoce la verdad. Muchos escritores han fundado movimientos y publicado infinidad de libros, tratando de solucionar la desgracia humana, y al final, se han reconocido ellos mismos como desgraciados. La verdad es que todos han hecho esto sólo desde sus puntos de vista e ignorando el único conocimiento que puede llevarnos a la verdad absoluta, y, por lo tanto, a la absoluta libertad: ¡El conocimiento de Dios!